Jlo pierde alrededor de 20 millones de dólares y no se dio cuenta que fue por culpa de Ben Affleck

Después de una década de silencio musical, Jennifer Lopez finalmente regresó a la escena con el lanzamiento de su muy esperado álbum «This is Me…Now» en febrero de 2024.

Acompañado de un cortometraje homónimo y una película titulada «The Greatest Love Story Told», el regreso de JLo prometía ser un evento monumental en la industria del entretenimiento. Sin embargo, las expectativas no coincidieron con la realidad.

A pesar de la intensa promoción y la inversión de aproximadamente 20 millones de dólares en la producción y marketing del disco, «This is Me…Now» no logró captar la atención del público como se esperaba.

Criticas negativas de la pelicula Greatest love story told

Las críticas negativas inundaron las redes sociales tras el lanzamiento del cortometraje, que fue ampliamente ridiculizado por su trama absurda y ejecución cuestionable.

La película «The Greatest Love Story Told» tampoco escapó a las críticas, centrándose en la vida personal de JLo y su relación con Ben Affleck.

Aunque la pareja había generado interés en el pasado, la dinámica retratada en la pantalla no logró conectar con la audiencia, dejando la película en un lugar de relativa insignificancia en el mundo del cine.

Como resultado de la falta de interés en su nuevo material, las ventas del disco y la asistencia a la gira mundial de JLo han sido decepcionantes.

La cancelación de fechas de la gira debido a la baja demanda solo agravó la situación, dejando a la artista enfrentando pérdidas significativas tanto en términos financieros como de reputación.

A pesar de su extensa plataforma y su estatus como una figura icónica en la industria del entretenimiento, el retorno de inversión para Jennifer Lopez en este regreso musical ha sido insatisfactorio.

El fracaso del disco, el cortometraje y la película plantean interrogantes sobre el futuro de su carrera y su capacidad para reinventarse en un paisaje mediático cada vez más exigente y volátil.

En última instancia, el regreso de JLo después de una década de ausencia musical no logró cumplir con las expectativas del público y la crítica, dejando a la artista en una posición incómoda y cuestionando su relevancia continua en la escena del entretenimiento.