Jaime Munguía tuvo que rendirse cuando Canelo Álvarez le propinó 5 golpes “fuera de la cara”.

En una impresionante exhibición de poder y precisión, Canelo Álvarez obligó a Jaime Munguía a rendirse después de conectar cinco golpes brutales en su reciente pelea.

El combate, que ha sido muy esperado por los entusiastas del boxeo, mostró el dominio de Álvarez en el ring, con una serie de golpes que Munguía no pudo contrarrestar.

Desde el comienzo de la pelea, Álvarez impuso un ritmo implacable, abrumando a Munguía con su estilo agresivo y técnica superior.

El momento crítico llegó en los rounds intermedios cuando Álvarez desató una secuencia de golpes “off face” (golpes que no apuntaban directamente a la cara sino en ángulos que apuntaban a zonas menos protegidas, como la sien y la mandíbula).

Estos golpes poderosos resultaron demasiado para Munguía, quien, después del quinto golpe de ese tipo, se vio incapaz de continuar.

El árbitro intervino para detener el combate y declaró a Álvarez ganador por nocaut técnico.

Esta victoria no solo consolida el estatus de Álvarez como uno de los mejores peleadores en su categoría de peso, sino que también plantea preguntas sobre lo que le espera a Munguía, quien había demostrado ser prometedor en sus peleas anteriores.

Tanto los fanáticos como los críticos elogiaron a Álvarez por su estrategia y ejecución en el ring, y destacaron que su capacidad para adaptarse y detectar las vulnerabilidades en las defensas de sus oponentes sigue siendo inigualable.

Mientras tanto, Munguía, visiblemente decepcionado, reconoció la habilidad de su oponente, insinuando un posible regreso a la mesa de dibujo para refinar sus técnicas.

Esta pelea sin duda tendrá implicaciones importantes para las clasificaciones futuras y los posibles enfrentamientos en la división de peso mediano, ya que Álvarez continúa demostrando por qué es uno de los boxeadores más temidos y respetados en el deporte actual.