Tras su grata presentación en Brasil, la pereirana es una de las cartas fuertes que tiene Colombia para lograr tiquete olímpico en el Panamericano que comienza hoy en Medellín.

Valentina Acosta, de 23 años de edad, es una de las figuras que tendrá el Panamericano de arco en Medellín. FOTO JAIME PÉREZ

Desde que Colombia recuperó, hace pocos meses, a este talento para el tiro con arco, su aporte no solo ha servido para lograr medallas en el ámbito internacional, sino también para soñar con volver, por equipos, a unos Olímpicos.

Se trata de la pereirana Valentina Acosta Giraldo, quien luego de convertirse en la primera arquera del país en ganar una medalla de oro mundial en la modalidad de recurvo (categoría juvenil, en Madrid, España-2019) y de competir en los Olímpicos de Tokio-2021, desapareció del radar atlético porque, según confiesa, necesitaba un respiro en medio de la responsabilidad y quizá de la presión que conlleva dedicarse de lleno al alto rendimiento.

Las otras prioridades que se le presentaron en ese momento, entre ellas estudiar y trabajar, le sirvieron para tener una lectura diferente del deporte y la vida, y regresar más fuerte para enfocarse con mayor precisión en una especialidad en la que en poco tiempo retornó a posiciones de prestigio.

“Antes de ser arquera era artista. Me gusta mucho la moda, pintar, el tema audiovisual, ahora estoy aprendiendo a tatuar. Todo es arte, como este deporte, en el cual se requiere de mucha precisión y detalle”, comenta Valentina, considerada la “niña diferente” de la Selección Colombia, la extrovertida, la que lleva peluches en su quiver (donde cargan las flechas) y quien decora su arco con brillos de diferentes colores.

“Venía haciendo esto desde los 15 años, y sentía que en ese momento requería de algo diferente, organizar ciertas cosas de mi vida. Esto es muy chévere, pero se requiere tiempo para moverse de un lado al otro, entrenar y viajar. Necesitaba madurar en muchas áreas y darles espacio a mi mente y cuerpo para que se recuperaran después de la alta presión”.

En mayo de 2023, tras dos años de haber dejado de disparar hacia la diana, la mujer de tez blanca, figura delgada y mirada dulce, comprendió que no valía la pena estar alejada de una especialidad en la que no le es tan difícil marcar la diferencia y en la cual encuentra paz, alegría y tranquilidad.

Tras acudir a un certamen nacional en Estados Unidos, donde reside, terminó en el segundo lugar ante deportistas mucho más experimentadas que ella. Ese podio le dio a entender que su técnica y amor por el arco seguían intactos.

“La sensación de disparar fue algo que no había tenido antes, sobre todo en la parte técnica y la paz mental que sentí. La pausa que tuve me ayudó a encontrar calma, control, y me volví a emocionar, sobre todo cuando se compite”, dijo la amante del género musical electrónica pesada.

En noviembre estuvo en los Juegos Deportivos Nacionales en el Eje Cafetero, en los que anhelaba que sus abuelos paternos Álvaro y Magnolia Acosta, y maternos Amparo y Ferney Giraldo, quien falleció en enero pasado, la vieran competir. Ante ellos logró 3 medallas de oro, 3 de plata y un bronce.

Tras esa buena actuación volvió a la Selección nacional, en la que acaba de ganar tres preseas, dos oros en equipos, uno en el Sudamericano y el otro en el Ranquin Mundial en Brasil, y bronce en este último.

Ahora en Medellín, donde comienza este sábado el Panamericano que otorga cupos a los Juegos Olímpicos de París, Valentina, al lado de sus compañeras Ana María Rendón y Maira Sepúlveda, buscarán confirmar su buen momento para darle nuevas alegrías a Colombia.

“En Brasil ganamos mucha confianza. Fue una buena referencia de lo que podemos hacer y lo que debemos mejorar. Sé que tengo mucho por ofrecer a este gran equipo. Si me voy, siento que no me estaría afectando solo a mí sino a este buen grupo con el que me complemento muy bien, por eso estoy de vuelta”, comentó con convicción la simpática Valentina.

Los cupos en juego

Lo mejores exponentes del tico con arco del continente americano se darán cita entre este sábado y el domingo 14 de abril en Medellín.

Primero, 70 deportistas de 19 países disputarán hasta este martes el clasificatorio de las Américas, en individual, a los Olímpicos a París; mientras que luego, con 206 atletas de 206 naciones, se efectuará el Panamericano, que en equipos también otorga cupos a los Juegos en Francia.

En sí se entregarán cuatro en individuales y dos en equipos. Además se darán en arco compuesto seis tiquetes tres en masculino y tres en femenino para los Juegos Mundiales en Chengdu, China, en 2025.